top of page
Search

Salud Financiera y como lo logré!

  • unatalanaysupizcad
  • Jan 31, 2023
  • 8 min read

¡Feliz 2023 para todos, he vuelto! Espero que este nuevo año sea más consistente con mi blog…

 

¡Amigos! La idea principal de este blog era, como dejé mi adición a las compras, pero una vez empecé a escribirlo me di cuenta de que estaba basado en como tener una vida financiera más organizada y como logré yo, una tal Ana alcanzar mi meta.

 

¿¡¿Todos tenemos locas adicciones a las compras?!?!?! ¡Estoy completamente segura de que la mayoría SÍ! Siendo muy honesta, era malísima en mis finanzas, un día llegue a ahogarme en mi propia irresponsabilidad y tome muy malas decisiones, esas malas decisiones no fueron de un día, fueron años cagandola. Pero un día cualquiera pensé que nunca más volvería hacer tantas estupideces en mi vida y decidí cambiar mi forma de ser. Desde aquel momento mi vida entera comenzó a ir en una dirección más seria.

 

Empecemos desde el principio, todo comenzó en el año 2006: Tenia un salario algo mediocre que cubría los pocos gastos de los que yo era responsable (es decir mi parte de la renta, mi carro, seguro de carro, teléfono, etc.) y aunque me sobraba plata (no mucha hay que aclara) jamás pensé en poner ese dinero extra en una cuenta de ahorros, ¡NO!, cualquier cosa que sobraba en ese entonces solo significaba salir a comer, fiesta y más fiesta, trago, ropa nueva, maquillaje nuevo, etc.…

El concepto de ahorrar no existía en mi cabeza y se escapaba de mi vida totalmente, además cuando alguien decía la palabra “ahorra” me provocaba matar a esa persona.

No quiero ni pensar cuantas tarjetas de crédito alcance a tener, si no estoy mal tenía 19 o algo así, en ese momento con límites de crédito relativamente bajos (afortunadamente). Gracias a Dios mis gastos realmente no podían exceder demasiado mis posibilidades de vida, no podía comprar mucho con mi tarjeta de crédito, pero cuando lo hacía, me tomaba 25.000 años para pagarlo porque, como ya dije cualquier plata que me sobrara después de los gastos que no podía dejar de pagar significaba dinero de “diversión”.

 

Y si les soy completamente transparente hay un poco de esa antigua Ana en esta nueva versión de mí, que llevo años formando y SI, leyeron bien ¡AÑOSSS! Ósea, me gusta disfrutar la vida y darme un caprichito de vez en cuando, trabajo duro, así que ¿Por qué no disfrutar de plata mientras estoy viva, ¿verdad? La única diferencia es que ahora ahorro como una ¡hijo de puta!

Pago mis tarjetas de crédito todos los meses, contribuyo a mi cuenta de jubilación con cada cheque, y empecé a invertir pequeñas cantidades (no me ha ido bien, pero sé que lo lograre) todo se trata de… lo adivinaste, EL EQUILIBRIO.

 

Entonces, ¿cómo cambiaron las cosas? Bueno, como dije, caí bajo, pero cuando digo bajo es BAJO, cuando decidí cambiar, hice un plan de acción, para poder ejecutar este plan de acción me tomo casi 3 años mientras salía del hueco en el que yo solita me había metido, acuérdense mis peores años fueron 2006-2007 y algo del 2008, les comparto lo que yo hice: 

 

·       Revise todos mis estados de cuenta bancarios y tarjetas de crédito:  Esto me ayudo a averiguar dónde estaba gastando la mayor cantidad de plata. Les cuento aquí entre nos, que me asuste, llore, me di muy duro a mí misma, pero básicamente me abrió los ojos ya que me estaba gastaba la plata en restaurantes, trago, comida y bueno en COMPRAS (zapatos, ropa, accesorios) y uno que otro préstamo a “amigos”.

·       Hice un presupuesto: Esto fue lo que más duro me dio, no me gustaba en lo absoluto, pero empecé poco a poco (así trabaja mi mente mejor cuando creo un hábito, y soy una firme creyente de los hábitos) quise tratar de guardar el 10% de mi salario, pero no era realista entonces empecé con un 3%, luego lo subí a un 5% y luego a 10% y esto lo guardaba en mi cuenta de ahorros cada vez que me pagaban. Cuando empecé a hacer esto y fui subiendo ese porcentaje de ahorros, significo menos plata para gastar en cosas idiotas, y para tener plata extra tendría que hacer algún recorte en alguna factura. Empecé en cosas como cambiar la compañía de celular, no comer en la calle, ¡no tomar más trago y absolutamente CERO COMPRAS! También corte en otras cosas como hacerme las uñas, ir a un salón caro para hacerme el pelo, mejor dicho, compras frívolas… Ya saben, simplemente eliminando todas las MEJORES cosas innecesarias que se suman mes a mes. 

·       Cambiar a un estado de ánimo diferente sobre “el gasto”:Para ser sincera esto le caló fuerte a mi mente irresponsable, porque pensamos pero que son $15 de las uñas de las manos, pero si le agregamos propina, me estaría gastando algo que podría utilizar en cosas básicas como ir al supermercado y comprar algo de comida, entonces por algunos años me hice las uñas yo misma, me dejé de pintar el pelo y me lo oscurecí, dejé de comprar las marcas más caras en los supermercados (esto ayuda mucho), ahorrar en cosas simples es una necesidad si estás tratando de crear un presupuesto, las pequeñas cosas SUMAN. Hoy en día todavía lucho con esto, pero después de muchos años de práctica se exactamente en dónde ahorrar y cuáles son las cosas que simplemente no entran en discusión, y no crean que soy perfecta, en este momento estoy trabajando en mi adición de pedir por Door Dash y UberEats (son un servicio de comida a domicilio). Y aunque en este momento puedo permitirme algunos lujos, sé que estoy desperdiciando una buena cantidad de mi platica solo por un servicio que es conveniente. 

Mi mejor tip… Cuando estaba arruinada, me decía a mí misma levanta el culo, y cocina ¡no compres comida afuera! 

·       Usa efectivo o débito para tus “Gastitos Divertidos”:Puedo decir con pecho inflado que nunca he fallado en esto, he sida muy estricta y solo uso mi tarjeta débito, que es esencialmente efectivo, lo que tengo en la cuenta es todo lo que tengo  y con lo que cuento y créanme he pagado una justa suma en tarifas de sobregiros en mi vida y este gasto extra te dejará aún más arruinado, gracias al señor de los milagros puedo decir que hace años de los años no tengo un cargo de sobregiro (espero no echarme la sal aquí) 

·       Cerré tarjetas de crédito pequeñas: como les dije anteriormente creo que llegué a un punto de tener 19 tarjetas de crédito, aún no sé a qué horas las cosas se salieron de control o cuando cometí el error de abrir estas tarjetas de crédito de almacenes (Victoria Secret, American Eagle, Banana Republic, Target, Home Goods, Walmart, Home Depot, etc.) literal las tenía todasssssssss y yo creyéndome muy pinchadita con ese mundo de tarjetas sin saber que estaba era arruinado mi crédito. Recibía una banderita roja por una nueva aplicación crediticia, una banderita roja por adquirir más deuda, una banderita roja en mi puntaje por el tiempo que la deuda permanecía abierta y finalmente una banderita roja cuando empecé a cerrar aproximadamente 17 tarjetas (ósea 17 banderitas rojas). Cuando empecé el proceso de volverme sería, decidí quedarme con solo 3 de las tarjetas que realmente tenían sentido para mi estilo de vida. Esta decisión fue basada no solo por mi crédito, sino que comencé a acumular puntos que al final se convirtieron el platica (quiero aclarar que, aunque dejé 3 cuentas de tarjetas de crédito, destruí las tarjetas físicas, lo cual me permitió bajar los balances, pero conservera las líneas de crédito) después de muchos años sin tarjetas de crédito físicas las volví a pedir porque me sentía lo suficientemente responsable para usarlas como debe ser. En este momento tengo 4 y sólo las uso para una emergencia.

·       Establece una meta: Aunque suene cursi esto es muy efectivo. Yo me puse una meta de ahorrar $800 para un viaje en mi cuenta de ahorros (un viaje no es el propósito para ahorrar, yo simplemente empecé así, porque mi cerebro funciona mejor si hay un propósito) en el pasar de los años esa meta cambio de nombre, cambio de suma, hubo meses que fue mínimo lo que aporté, porque a veces tenía que coger de ese fondo, pero siempre lo retomaba. Por mucho tiempo aporte este 10% a mi cuenta de ahorros, que en ese tiempo tenía un nombre o una meta en específico y a medida que me acercaba más y más a ese objetivo, al ahorro comenzó a volverse adictivo, esperaba esa transferencia cada otra semana y sinceramente, ver crecer ese número es de lo más gratificante. ¡Tan gratificante, que, de hecho, cuando llegue a la mandita meta, ya había terminado con la idea del viaje y solo quería quedarme con el dinero Cha-ching! Simplemente la vida no es de caramelo, de esos ahorros que con tanto sacrifico ahorre me toco que coger la gran mayoría de ellos. En el 2021 me toco que pagar un abogado (que no fue económico) para defender los derechos de mi hijo y fui a un montón de médicos por la depresión severa en la que caí, los copagos de médicos, terapias y drogas van sumando. En el 2022 me llego la racha de la pésima salud. Copagos de exámenes, médicos, especialistas, tratamientos y dos cirugías me dejaron sin absolutamente nada de ahorros, quede literal en cero. Y aunque recibía mi salario por mi trabajo recibía mucho menos ya que estaba en licencia por enfermedad. Ahora que todo ha vuelto a la normalidad, he empezado otra vez a ahorrar de cada cheque, he empezado pequeño otra vez, solo aporto el 3% y a veces no puedo ya que las cuentas de hospital siguen llegando. Pero es mejor hacerlo sin prisa y con calma, para no perder tu norte.

·       La adicción de ahorrar es real: sinceramente, creo que esa parte fue lo que me hizo cambiar mi forma de ser, la emoción que sentía cuando hacía esa transferencia, incluso aún la espero con ansias. Me encanta quien me volví, porque cambié mi forma de pensar y cambié la forma en que gastas cuando tienes ahorros. 

·       Compra con moderación: No me malinterpreten, me encanta comprarme nuevos bolsos Gucci, pero siempre que pague mis facturas y guarde dinero en mis ahorros (mi objetivo en un futuro es ahorrar al menos el 40% de mis ingresos) y cuando logre eso, pues va a ser la única vez que vuelva a derrochar mi plata. Muchas personas piensan que derrocho mucho y no es así, lo que pasa es que cuando compro algo no es algo que puedas comprar en Ross o Marshalls, yo compro un poco más caro, me gustan las marcas en ciertas cosas y creo que todos no pensamos igual y menos tenemos los mismos gustos, yo prefiero comprarme ropa cara, tener un carro bueno, el ultimo celular y tu prefieres viajar en las vacaciones. Todos tenemos gustos y también vemos que es lo que es necesario para hacernos felices. Sinceramente la vida es cara comúnmente, yo voy a Target por jabón para lavar ropa y me voy con $350 en cosas que ni siquiera necesito, Quiero decir algo ¡esa mierda suma! Pero me hace feliz.

La moraleja de la historia es esta: no vivas más allá de tus posibilidades. Puedes requerir que tomes un descanso de tu vida social, menos almuerzos con alcohol, menos happy hour, menos citas para tomar una cervecita, menos comidas en buenos restaurantes, menos Gucci, menos Louis Vuitton, menos arreglada de uñas, menos arreglarse el pelo. Pero te prometo que cuando puedas pagarlo todo, te sentirás mucho mejor. Solo dile a tus amigos que estás canalizando la vida de una mujer que ahorra y que es un chin más responsable y simplemente no puedes. Ellos los van a comprender y te van a apoyar y con suerte van a estar en la misma tónica. 

Más adelante te prometo no perderás el sueño por problemas de dinero, los últimos meses del 2022 fueron terribles para mí y mi salud financiera, pensaba ¿Dios que debo hacer? Y simplemente volví al principio, cambie compañía de celulares y ahora me estoy ahorrando casi $200 al mes, chequee mi factura de luz, llame a la compañía y milagrosamente mi factura de energía bajo casi $150, cambie de seguro de carro y me ahorro ahora $100, me voy al mercado con lista en mano y solo pongo tres comodines en mi mercado que significan lo que te dé la gana extra, y así mantengo también mi presupuesto de comida controlado (me di cuenta que en comida de supermercado es lo que más gasto) apegarme a un sistema de ahorro en el mercado es vital para la salud financiera de mi familia, pero todo se puede hacer mientras nos organicemos y tengamos conciencia de lo que queremos lograr. Tengo una meta clara para finales de este año y principios del otro, sé que la voy a conseguir. Créeme si te organizas financieramente no tendrás miedo a contestar llamadas de teléfonos raros porque crees que son cobradores (ya estuve allí); en cambio, obtendrás una emoción enfermiza al ver crecer tu dinerito, Y esa es una promesa de una Tal Ana llena de caos. 

 
 
 

Comments


bottom of page